¿Hacía dónde va?

A poco de cerrarse la primera mitad de temporada, la situación del Liverpool es ambigua. Sin disputar torneos internacionales, hizo aguas para llegar a la cima en el Torneo. Previo al triunfo como visitante ante el Norwich por 2 a 0, cosechó dos empates paradójicos.
   Frente al Manchester United, el partido más deseoso de ganar, por rivalidad, y más difícil, fue 1 a 1 con sabor a derrota. El conjunto de Dalglish fue superior durante todo el encuentro, pero a pocos minutos del final, el último campeón encontró un punto.
   El fútbol da revancha, dice el dicho y el Liverpool tenía la posibilidad. Otra vez en casa, en frente el Norwich. A priori un encuentro accesible para llevarse los tres puntos. Mismo resultado, pero lejos de ser el Liverpool arrollador que puso contra las cuerdas al Manchester. Poca certeza en ataque, falta de ideas y sin garantías en el fondo. Otro tren que dejaba pasar.
   La Premier League es una liga extensa, la cual requiere una constante regularidad, tanto en sus comienzo, desarrollo y epílogo.  Diez puntos lo separan del Manchester City, cómodo líder. A esta altura no es determinante, pero si se prolongase esta ventaja en el transcurso de la liga, si lo será.
Todavía hay un largo camino por recorrer, pero la sensación es que los Reds todavía no encuentran la regularidad precisa para transitarlo.
   Mientras tanto, con un equipo rotativo, avanza en la Curling Cup, donde lo aguarda el Chelsea en cuartos de final. Allí ganó todo partido que disputó. De hecho, en la última ronda, la víctima fue el Stoke City como visitante, rival que lo derrotó por primera vez en el torneo, justamente como local.
   Esta serie de sucesiones, denotan la falta de equilibrio. Liverpool aún no ha logrado aferrarse a algo y hacerse fuerte con eso. La Curling Cup podría serlo, para ello habrá que ver qué pasa con el Chelsea, su primera prueba de fuego.
  En tanto que en la Liga, tiene la mismísima posibilidad de volver al triunfo de local, donde los puntos desperdiciados duelen más. El turno lo tiene al Swansea City.  Todavía hay margen, para asentarse y aceitarse, para cuando sea el turno del Chelsea y del Manchester City, sus otros dos próximos rivales, ambos por la liga.

Suárez en llamas, dentro y fuera del campo

Dentro del fútbol, existen diversas situaciones que pueden provocar una disconformidad o molestia entre el jugador y el director técnico. Algunas quedan, precisamente, en situaciones del momento que son resueltas luego del pitido final cuando el equipo ya se encuentra en el vestuario y las pulsaciones están en disminución. Mientras que otras pueden derivar riesgos más severos, como conflictos o internet.
Un episodio de lo referenciado se vivió en Anfield, donde Liverpool derrotó por 2 a 1 al Wolverhampton. Posteriormente se conocerá si tuvo trascendencia o no, pero sin duda desconcertó a todo aquel que estuviera siguiendo el desarrollo del partido.
El duelo no estaba decidido ni mucho menos. Los locales se habían ido al descanso con un 2 a 0 a su favor, pero en la reanudación de la segunda mitad el rival descontó rapidamente en el marcador. Se abría una incertidumbre con el resultado y el desarrollo del juego, Luis Suárez era la figura de la cancha. Autor del segundo gol (una genialidad) y protagonista en otras dos ocasiones que fueron de las más claras para su equipo. Determinante, era una pesadilla para los defensores rivales. Comandante de los ataques, siempre como opción para descargar y generador de situaciones de gol. El uruguayo tenía motivos de sobra para ser el "man of the match".
En búsqueda de sentenciar el partido, Kenny Dalglish empezaba a mover las fichas y ya había mandado a la cancha a Dirk Kuyt, delantero poli funcional que se puede desempeñar como mediocampista/extremo, por Jordan Henderson. Consumado el primer cambio, poco iba a faltar para el segundo y más aún, si en el banco de los relevos estaba, quien de a poco va tomando minutos, Steven Gerrard. Su ingreso era inminente. A falta de nueve para el final, el resultado estaba abierto, Suárez seguía haciendo de las suyas, pero el Liverpool no daba garantías de quedarse con los tres puntos hasta que el partido finalice. Gerrard a la cancha, afuera Luis Suárez. Sí, leyó bien. Sorpresa para muchos. No así para el oriental, que en cuanto supo que era él quien se debía retirar su rostro ya estaba transformado en fastidio y bronca. Llegado al banco de suplentes, saludó al técnico sin mirarlo. Desconsolado, envuelto en llamas y con cara de "¿por qué a mí?", permaneció allí hasta el final del partido. Acto seguido se encaminó para los vestuarios, atinando a un mínimo saludo a los hinchas que se encontraban cercanos al jugador.
Se puede hacer un párrafo aparte sobre si se comparte la decisión del técnico o no. Si se puede afirmar que fue sorpresivo, llamativo, curisio y que el fastidio del delantero era más que evidente. Una situación que a veces se acostumbra a ver en el fútbol del mundo y que, en esta ocasión y por primera vez, le tocó al ex Ajax desde que llegó al club inglés. En tanto que los hinchas, discrepantes o no con esta decisión, desearán, ante todo, que solo quede en una situación más.

Triunfo y regreso

Por la tercera ronda de la Curling Cup, Liverpool, el equipo más ganador de la competición derrotó ayer 2 a 1 al Brighton como visitante. Los goles del triunfo los anotaron Dirk Kuyt y Craig Bellamy, mientras que Ashley Barnes descontó para el equipo local al cierre del partido. Como en el partido de la ronda anterior, victoria ante el Exeter por 3 a 1 también como visitante, Maximiliano Rodríguez fue parte de la alineación titular.

A pesar de ser una competición de menor jerarquía, ubicándose por debajo de la Premier League y la FA CUP (la competición más antigua de Inglaterra), el triunfo revitaliza al equipo, probando otras variantes en cancha y recuperándose de la dura derrota en la liga (segunda consecutiva) por 4 a 0 ante el Tottenham, el pasado fin de semana.

A su vez, no fue un partido más. Por primera vez en lo que va de la temporada, Steven Gerrard volvió a los terrenos de juego, luego de reponerse de su lesión en la ingle, de la cual había sido intervenido y, posteriormente, resentido de la misma en abril. Esta lo dejó afuera del resto de la temporada pasada y lo tuvo en plena rehabilitación en los comienzos de la actual. Su regreso se produjo a los 75' del segundo tiempo por el uruguayo Luis Suárez, cuando el partido iba 2 a 0 a favor de los de Dalglish.

Se espera que el mediocampista esté entre los 18 convocados para la próxima fecha de la Liga, cuando el Liverpool reciba al Wolves como local.

Si bien fue por la tercera ronda de la recién comenzada Curling Cup, Dalglish está sonriendo por partida doble, debido al triunfo y al regreso, anhelado por todo Liverpool, de su emblema: Steven Gerrard.

Una leyenda llamada William "Bill" Shankly

   Un 2 de septiembre, hace 98 años, nacía uno de los entrenadores más populares de Gran Bretaña y uno de los baluartes más importantes de la gloriosa historia que posee el Liverpool Futbol Club. Un ídolo histórico con todas las letras.
   Escocés, se inició como jugador disputando más de 300 partidos en el Preston North End, equipo de la Football League One (la segunda división de Inglaterra) e inclusive llegó a representar a su país en siete oportunidades. Su proyección como futbolista se cortó en 1939, cuando se desató la Segunda Guerra Mundial y se suspendieron todas las competiciones en Inglaterra.
   Finalizada su carrera en 1949, empezó la labor de entrenador con tan solo 36 años. Su arribo al Liverpool tuvo una serie de ante cesiones. Primero se hizo cargo de equipos como Carlisle United (su primer equipo como jugador) y luego recaló en otros tres: Grimsby Town, Workington, Huddersfield Town. La mayoría de sus alejamientos se debieron a distintas confrontaciones con sus respectivas comisiones directivas. El escocés tenía un carácter fuerte y vivía el fútbol con mucha intensidad.
   Diez años duró esa transición antes de llegar a los "Reds". El club vivía un presente negro. Además de limitar en la segunda categoría, se encontraba en deplorables condiciones y disponía de un campo de entrenamiento totalmente arruinado.
   Los éxitos de Shankly fueron de menor a mayor: devolvió al equipo a primera, se consagró campeón de la FA CUP (la competición más antigua del país) y luego obtuvo tres títulos de la liga doméstica y sumo cuatro Community Shields (Supercopa Inglesa) a las vitrinas.
   Pero Bill no sólo llenó de historia al club desde lo táctico y estratégico. Fue él quien instauró en Liverpool esa mística con la cual se lo conoce hoy en día. El cambio de color de la equipación a un rojo, que pudiera generar un impacto psicológico: poder y peligro. También ordenó la colocación del legendario lema "This is Anfield", que se encuentra en las escaleras que dirigen del vestuario al campo de juego, para recordarles a aquellos que las transiten que están frente ante un escenario mítico.
   Luego de haber generado un impacto extraordinario y llevar al club a lo más alto, "Bill" cesa en su cargo, dejando el equipo en manos de su colaborador.
   En homenaje a su fallecimiento, a causa de un infarto, se celebró un partido y se erigieron unas puertas de forja en las que se lee el eterno eslógan, del himno del club, "You’ll never walk alone".
   Hasta el día de hoy, es el entrenador que más partidos dirigió al Liverpool con un total de 743.
En su honor se halla una estatua en la entrada del estadio que reza: "The man who made people happy". Un reconocimiento a todo una leyenda...

Un punto, dos caras

   Dos caras fue la que mostró el Liverpool en la tarde del sábado en Anfield frente al Sunderland en el
inicio de la Premier League de Inglaterra. Con la esperanza y el plantel renovados para arrancar con el pie derecho, era un buen desafío para ser puesto a prueba ante a un equipo de mitad de tabla, pero modesto al fin.
   Durante la primera mitad, los roles fueron bien marcados, un Liverpool dominador, dueño de las acciones, con una visita a la espera de posibilidades de contragolpear. Paradoja de estas últimas palabras fue la ocasión que pudo haber determinado el rumbo del partido y que llevó al Liverpool a tener la posibilidad de ponerse en ventaja. La misma provino de un córner en favor del conjunto visitante que los Reds defendieron con sencilles y derivó en un cara a cara de Suárez frente al arquero, a quien gambetó y Richardson lo terminó volteando. Penal y correspondiente expulsión, ya que impedía una jugada manifiesta de gol, que el árbitro no consideró y fue solo amonestación. Todo siguió igual, porque Suárez erró el penal, pero la insistencia de los de Dalglish fue merecida y hubo revancha para el uruguayo que a los 12' puso el 1 a 0. Todo era color de rosa y a descansar...
Al retorno, un deja vu del semestre pasado: el conformismo, en parte, y la poca contundencia, hizo que el rival creciera y lograra la paridad en el minuto 57 (genial definicion de media tijera del sueco Larsson). El transcurso de la segunda mitad dejó a los de Dalglish carente de ideas y con llegadas sin claridad, que Carroll no supo concretar.
   Fueron buenas las presentaciones de Charlie Adam y Stewart Downing, no así las de Jordan Henderson. Encontrar el ritmo será difícil, pero primero el tecnico tendrá la difícil tarea de encontrar el 11 inicial que pueda darle regularidad a un equipo que hace rato no la tiene...

Alineaciones de los equipos:
Liverpool: Reina; Flanagan, Carragher, Agger, Enrique; Henderson, Leiva, Adam, Downing; Suárez, Carroll

Sunderland: Mignolet; Bardsley, Ferdinand, Brown, Richardson; Larsson, Cattermole, Colback, Elmohamady, Sessegnon; Gyan

En medio del caos, tiene todo preparado

Desde el fin de semana pasado, la violencia se apoderó de la ciudad de Londres, donde ya hay más de 800 detenidos. La situación se remonta al pasado fin de semana, donde un grupo de ciudadanos se agolpó en las calles de la ciudad en búsqueda de respuestas por la muerte de un joven afroamericano de 29 años, el  jueves, en el barrio de Tottenham, a manos de la policía.
Son las fuerzas policiales que están interviendo en los disturbios y realizando investigaciones, sobre los responsables de los adémanes, que involucran a personas de roles y edades variadas en la sociedad. Con el propósito de devolver la paz a una ciudad acostumbrada a ella, los efectivos están abocados al asunto. Es por eso que el amistoso que estaba pactado entre Inglaterra y Holanda, en Wembley, fue suspendido. Rio Ferdinand y Wayne Rooney,  compañeros en el Manchester United, se refirieron a lo acontecido. "¿Quién quiere ver fútbol cuando nuestro país está en crisis?", apoyó la decisión el defensor. Mientras, Rooney calificó como vergonzoso lo que está aconteciendo.
Entre tanto revuelo y en vísperas del inicio de la Premier League, peligran los partidos a jugarse dentro del territorio de la capital inglesa. De ser la medida parcial, el encuentro del Liverpool frente al Sunderland como local, el sábado a las tres de la tarde, no se verá afectado. Será un día especial para Jordan Henderson, reciente incorporación que, en caso de jugar, hará su debut nada más y nada menos que ante su ex equipo.
Los conducidos por Kenny Dalglish esperan empezar con el pie derecho el camino largo e intenso de la liga. Para ello, también se han sumado los mediocampistas Stewart Downing (Aston Villa), Charlie Adam (Blackpool) y el arquero Alexander Doni (Roma). Y además, el Liverpool cuenta con el regreso de Albeto Aquilani de su préstamo en la Juventus
Con todo listo y a falta de 3 días, hasta el momento, ni el caos los puede detener. ¿Será un buen augurio de lo que vendrá?

Deportivo empates

   Mientras el equipo se prepara de cara a la temporada que viene, realizando la pretemporada en China, donde tiene concertados una serie de amistoso (el primer será frente al Guangdong Sunray Cave el miércoles), Luis Suárez (Uruguay) y Lucas Leiva (Brasil) no descansan y siguen disputando la Copa América en la Argentina.
   Ambos participaron en la segunda fecha del cértamen. El viernes, Uruguay empató 1 a 1 ante Chile y Suárez fue titular todo el encuentro, conformando el tridente ofensivo junto a Diego Forlán y Edison Cavani, que a principios del segundo tiempo debió ser reemplazado, a causa de una lesión. El conjunto celeste logró ponerse en ventaja a los 8' del segundo tiempo, tras una gran intervención del número 9, quien desbordó por el sector izquierdo dentro del área y le sirvió el gol a Álvaro Pereira, que solo tuvo que empujarla hacia la red. Luego, Chile llegó a la ventaja por medio de Aléxis Sánchez, para sellar cifras definitivas.
   El partido se jugó en el estadio Malvinas Argentinas, en la ciudad de Mendoza, ante 37.000 espectadores. A pesar de la paridad, el ex Ajax fue el que más inquietó a la defensa chilena, siendo decisivo en el marcador, otra vez. Recordemos que en el primer partido de Uruguay, ante Perú, obtuvo el mismo resultado, anotando un gol, que sirvió para igualar el encuentro.
De esta manera, el equipo dirigido por Oscar Tabárez, quedó tercero con 2 unidades y jugará el último partido de la primer fase frente a México, que completa el grupo C y que aún no pudo sumar.
   Por otra parte, el domingo Brasil también cosechó su segundo empate en lo que va de la Copa, fue 2 a 2 ante Paraguay. Se había puesto en ventaja con un gol de Jadson a los 39' del primer tiempo, pero en el complemento, Santa Cruz y Haedo Váldez dieron vuelta la historia, a los 9' y 21'. Parecía que el triunfo se lo llevaba la albiroja, pero Fred empató a los 44', cuando el partido se moría.
  El mediocampista central, Lucas Leiva, disputó todo el encuentro, en el cual fue amonestado y no tuvo incidencia en el resultado.
Al igual que Uruguay, Brasil cosechó su segundo empate y se encuentra tercero en el grupo B, que comparte junto a Venezuela y Ecuador, este último su próximo rival al que deberá vencer si quiere seguir con vida en esta Copa América.

Reportes históricos

    Existen fechas de aniversarios, recordatorios, homenajes y demás. En nuestro país, el día del periodista tiene lugar todos los 7 de junio. Dicha fecha que fue estipulada por el Primer Congreso Nacional de Periodistas celebrado en Córdoba, en recuerdo de el 7 de junio de 1810, cuando Mariano Moreno fundó la "Gazeta de Buenos Ayres", primer periódico en el país.
   En un ambiente como el del periodismo, se recuerda hace casi ya un año, la sorpresa de todos los medios presentes en los festejos de España campeón del mundo en Sudáfrica 2010, cuando José Manuel Reina, arquero titular del Liverpool, segundo arquero de "la Roja", protagonizaba un show con todo el plantel campeón, con micrófono en mano, anunciando a cada uno de sus compañeros en los festejos de su selección, mientras eran agasajados por una múltitud de hinchas.  "Pepe", con todo su espectáculo, acaparó todos los flashes y dio la nota en aquel festejo inolvidable para todo el país europeo, que había logrado su primer campeonato del mundo. Fue tal la repercusión que tuvo Reina, que terminó siendo más destacado por su actuación allí, que por su presencia en Sudáfrica, ya que en todos los partidos fue suplente de Iker Casillas, arquero que disputó todos los minutos como titular.
   Volviendo aún más hacía el pasado, esta vez por Uefa Champions League y sin festejo de por medio, se registra un hecho ligado a una entrevista que difícilmente ningún seguidor del Liverpool pueda olvidar. Era una instancia decisiva y sufrida, en Estambul, el Liverpool se iba camino al vestuario con un 3 a 0 abajo y durante ese trayecto, un reportero entrevistó a un Fernando Morientes desconsolado. El reportero iba en búsqueda de sensaciones, respuestas y reacciones por parte del jugador. Sin éxito, obtuvo el testimonio de alguien que estaba abatido y derrotado, a pesar de que restaban 45' por jugarse. En ese archivo, quedó un gusto a derrota y sorpresa para los receptores que seguían con atención la final. Luego, habría otra sorpresa, la que ya todos conocen... El Liverpool revertiría la historia y seguramente las palabras de Morientes hayan quedado atrás, reemplazadas por otras llenas de euforia.

Suárez no se frena

   A pesar de estar en época de receso en Europa, con las competiciones ya finalizadas, planteles de vacaciones y los clubes en búsqueda de nuevas adquisiciones, el Liverpool fuera de toda actividad, tuvo a dos compañeros del club enfrentados cara a cara, Dirk Kuyt y Luis Suárez, ambos compañeros de ataque en el equipo rojo.
   El miércoles 8 de junio, las selecciones de Holanda y Uruguay, reeditaron  la semifinal del mundial de Sudáfrica 2010, en un amistoso en el cual se disputaba la Copa Confraternidad, que sirvió como preparación para el conjunto Celeste para la próxima Copa América en la Argentina. En el estadio Centenario fue empate 1 a 1 y los protagonistas del encuentro fueron los dos centrodelanteros de ambos seleccionados, Dirk Kuyt por parte de Holanda y Luis Suárez de los locales. El uruguayo puso en ventaja a su equipo en el minuto 81', mientras que Kuyt logró el empate en la agonía del encuentro. Luego, Uruguay se quedó con el triunfo, tras definiciones desde el punto del penal que terminó en 4 a 3. Además de anotarse en el marcador, Suárez fue incidió en todo el partido, provocando peligro en la defensa holandesa, elevando el rendimiento de su selección en el segundo tiempo.
   No es casualidad que el Liverpool se haya inclinado por él en el verano pasado para cubrir la ausencia de Fernando Torres, transferido al Chelsea. Para ello tuvo que desembolsar 26,5 millones de Euros, al Ajax de Holanda, club donde era capitán y había marcado más de 100 goles. Sumado a esto, su presente venía en alza. Fue un indiscutido en el once inicial de Oscar Tabárez, durante las eliminatorias y en el Mundial, en el cual protagonizó un papel importante y no solamente por sus anotaciones (3 en 6 partidos), sino por salvar la caída de su arco en el partido por cuartos de final frente a Ghana, en el cierre del partido, cuando atajó una pelota con destino de gol, que eliminaba a Uruguay. El goleador fue expulsado y los africanos malograron el penal y luego fue Uruguay que consiguió a avanzar por medio de esa vía, después del tiempo suplementario.
    El recuerdo de Torres ya quedó atrás, Suárez se encargó rápido de reemplazar sus goles por los de él. En su début ingresó en el segundo tiempo y anotó el segundo gol del equipo. De buen desempeño en la ofensiva de los de Anfield y generador de la misma, se ganó el respeto y cariño del público. Mientras tanto, busca continuar por la misma senda, en la próxima temporada, pero antes, en el desafío que tendra su selección, en menos de un mes.

Un 3 de junio hace 119 años...

   Es imposible no rememorar un acontecimiento como el del 3 de Junio de 1892, fecha que está sumamente ligada  a los primeros pasos del club en sus orígenes. Aunque en el repaso de su historia, la cual no coincide en lo absoluto con su pobre presente, se evidencie un brillo y un contraste, injustificado sería privarse de no rendir líneas de homenaje a uno de los máximos exponentes del fútbol inglés y del mundo.
    Su fecha de fundación se remonta al 15 de marzo de 1982. Entre esa fecha, se llamó Everton F.C. and Athletic Grounds Ltd, hasta el 3 de junio, cuando adquirió el nombre de Liverpool Football Club, tal cual como se lo conoce hoy. Si bien lo mencionado se refiere a un cambio de denominación la fecha no es un dato menor, ya que a partir de allí el club pasó a ser uno solo e independiente. Es por eso que a la misma se la puede considerar como la fecha de fundación del club que es hoy.
   Para destacar su historia de gloria, los números hablan por si solos: sus 18 títulos en la liga Premier (solamente superado por el Manchester United, reciente campeón) lo ubican como uno de los más ganadores. Es aquí donde se evidencia su decaída en la élite del fútbol inglés, ya que en 1990 consiguió su última obtención. Dentro del plano internacional, posee 5 trofeos de la máxima competición europea: la Champions League, y se ubica por detrás del Real Madrid y Milan de Italia, en ese orden.
   A su vez, el Liverpool es poseedor del derby más antiguo de la liga: versus Everton, dicho clásico se juega desde hace 112 años, a raíz de que ambos equipos se encuentran en la ciudad de Liverpool.
   Su himno, una canción llamada "You'll Never Walk Alone", se adjudicó al club de forma casual. Su melodía resonaba siempre de fondo en el estadio previo a los encuentros, hasta que un día por  fallas técnicas hubo una excepción y los simpatizantes lo trasladaron a las gradas, en principio como una broma que luego tras concluir dejaría mudo a los hinchas que al ver al equipo surgir al campo de juego lo recibieron con una ovación y se dispusieron a cantarlo nuevamente. Tal fue el impacto que es un ritual infaltable en el principio y final de cada partido que disputen "los Reds".
   Respecto al presente, en poco más de un año, el club cambió de propietario en dos ocasiones, a causa de  una crisis económica en la que se vio afectado y terminó siendo transferido. Actualmente es comandado por el empresario estadounidense Tom Werner.
   Entre su mala racha, con sequía a nivel nacional, crisis económica y cambios de directores técnicos con frecuencia, su última hazaña se registra en el 2005 en aquella final de la Champions League que disputó frente al Milan, en Estambul. Allí, luego de ir perdiendo 3 a 0 en el primer tiempo, logró la igualdad y por definiciones desde el punto del penal se quedó con la gloria.
   La mancha negra en este breve repaso de su historia fue en 1985, en un partido disputado frente a la Juventus, en Bruselas, por otra final de la Champions League, cuando previo al partido, como consecuencia de una gresca entre ambas parcialidades, terminaron atrapados contra las vallas sin posibilidad de escapatoria centenares de hinchas italianos. Este acontecimiento derivó en la muerte de los mismos y se lo conoce como "la tragedia de Heysel". Como castigo, al Liverpool lo suspendieron por 6 años en competencias internacionales.
   Con más brillos que contrastes, en sus 119 años de vida se encuentra ubicado por debajo de lo que cosechó a lo largo de su historia, pero que, en medio de un período de transición, buscará volver a la plenitud que tuvo a lo largo de toda su vida.

Javier Mascherano regresa a Inglaterra

   El ex Liverpool, Javier Mascherano, retornará a tierras inglesas, donde supo alcanzar su máximo potencial que lo llevó al día de hoy a pertenecer a las filas del Barcelona, equipo que disputará la final de la Champions League frente a Manchester United en Wembley a las 15.30, hora Argentina.
   "El jefecito" llegó a Barcelona, a fines de agosto, proveniente de los "Reds" comandado por Rafa Benítez en ese entonces, quién lo había solicitado cuando el rosarino defendía la camiseta del West Ham. El traspaso se concretó a cambio de unos 22 millones de euros y firmó un contrato que lo liga por cuatro temporadas al club catalán.
   Para disputar la final, Mascherano se verá las caras con un rival viejo y conocido al cual enfrentó en varios clásicos históricos como lo son Liverpool- Manchester. Frente a este rival, el santafesino disputó siete encuentros, todos por Premier League, con tres victorias, cuatro derrotas y una expulsión. Precisamente, el Manchester United se consagró campeón de Premier League este año, alcanzando su título 19 y superó por la mínima al Liverpool.
   No será la primera final que le toque vivir al argentino: en el 2007, año en que llegó al Liverpool, el Milan lo venció por 2 a 1, en la final de la Campions League disputada en Grecia. En aquél entonces el Milan se tomó revancha de aquella remontada épica de los ingleses en el 2005 (victoria por penales tras revertir un 3-0 en contra). Mascherano jugó el partido completo, recibió una amarilla y lidió con la difícil tarea de marcar a Ricardo Kaká.
   El destino vuelve a unir al Barcelona y al Manchester como hace dos años, allá en Roma. Fue 2 a 0 para los españoles, que intenterán repetir lo conseguido en aquél entonces. Por su parte, Javier Mascherano volverá a jugar su segunda final, pero con distinto equipo. ¿Será distinto el final?

Maxi gol

   Al término de la Premier League de Inglaterra, el mediocampista argentino, Maximiliano Rodríguez registró su segunda mejor marca de anotaciones en lo que va de su carrera, con un total de 10 sobre 28 partidos disputados.

   Su llegada se produjo en el período de traspasos del verano del 2010. En ese entonces el Liverpool era dirigido por Rafael Benítez, que se deleitaba con la nueva incorporación del argentino, proveniente del Atlético Madrid, donde contabilizó una marca casi idéntica, también con 10 goles en 29 partidos jugados, en su primera temporada.

   En su arribo a Liverpool no tuvo el mismo arranque, ya que en esa temporada sólo anotó 1 gol en 17 partidos.

   Distinto fue en la siguiente temporada, en la cual el equipo iniciaba una nueva etapa bajo el mandato de Roy Hogdson, quien posteriormente y de forma prematura fuera sucedido por Kenny Dalglish, un histórico del club.

   Entre esos sucesos, el argentino fue de menor a mayor, encontró su lugar en el once inicial, sobre la banda izquierda, a pesar de ser diestro y de que no sea su sitio habitual.

   De un cierto modo, no sorprende que el rosarino diga presente a la hora de anotar. Desde sus inicios, mostró esas características ofensivas y con presencia en el área contraria. Lo llamativo en este caso, es que de sus 10 goles en la liga, anotó dos hat-tricks y ¡en menos de un mes!. Ambos casos fueron victorias: 5 a 0 al Birmingham (23/04) y 5 a 2 al Fulham (9/05). El resto de sus víctimas fueron Bolton, West Ham, Aston Villa y Newcastle, con una anotación en cada encuentro. Y otra estadística que cuenta es que cada vez que el ex Newell's marcó en la temporada, el Liverpool ganó.

   En las estadísticas puede resultar sorpresivo, lo cierto es que, la sorpresa es una de las virtudes del jugador dentro de la cancha, cuando acompaña al delantero de área. Tal es así, que fue el goleador del equipo, por detrás del delantero holandés Dirk Kuyt, con 13 goles. Hasta el momento, "La fiera" lleva 11 goles en 52 apariciones en el club inglés y 89 goles a lo largo de toda su carrera a nível equipos.