lunes, 27 de agosto de 2012

Pagó caro sus errores


Por la segunda fecha de la Premier League, Liverpool  empató 2-2 frente a Manchester City en Anfield, donde se puso dos veces en ventaja,  a través de los goles de Skrtel y Suárez (Yaya Touré y Tévez para la visita), pero que no pudo sostener, a causa de dos errores defensivos.
Brendan Rodgers había introducido dos cambios con respecto al equipo que jugó la fecha pasada,  Coates ocupó el lugar del suspendido Agger y Sterling reemplazó Downing (cambio táctico).
Si bien fue un partido equilibrado, con la victoria al alcance de los dos equipos, fue el Liverpool el que dejaría los dos puntos en el camino y pagaría caro sus propios errores. Primero Reina, tras un mal cálculo de salida ante un centro enviado desde la izquierda, que Yaya Touré aprovechó.
Transitoriamente Suárez revivía  la alegría con un gol de tiro libre y reivindicaba al equipo, pero iba a ser en vano ya que a pocos minutos del final, cuando el City no encontraba los caminos y el Liverpool "parecía" tener el partido controlado, Skrtel sorprendió a todo el mundo con un pase hacía atrás sin destino de ningún compañero que fue aprovechado por Tevez, quien quedó mano a mano con Reina y no perdonó.
El empate dejó un sabor a derrota por las circunstancias que se dieron durante el partido, por la mejoría en la  producción mostrada (a pesar de las dos falencias) ante un candidato fijo a pelear el torneo y porque no puedo llevarse la victoria en casa y aún no sumó de a tres. Distinto para el City, que había ganado en la primer fecha y el punto rescatado en condición de visita no le cayó mal.
A pesar del sin sabor del empate, para rescatar fue la buena actuación de Sterling, quien causó buena impresión el pasado jueves en el partido de ida ante el Hearts en Escocia, por la fase preliminar de la Europa League. El extremo de 17 años, jugó por la izquierda y desequilibró a la defensa rival constantemente y siendo siempre una opción de ataque.
Lo lamentable fue la nueva lesión de Lucas Leiva que había sido reemplazado por Shelvey a pocos minutos de comenzado el partido.






martes, 21 de agosto de 2012

Jugadores con perfiles cambiados: ¿sirven?

Vieja alineación de Liverpool, esta vez con Maxi Rodríguez invertido

En la actualidad, es común ver en el fútbol mundial las innovaciones en cuanto a los posicionamientos de determinados jugadores. Una de ellas, a la que se refiere y referirá este texto, es la que corresponde a la ubicación de jugadores con los perfiles de sus piernas hábiles cambiados.
Ocurre en todas partes del mundo y hasta con los mejores jugadores. Ejemplos hay suficientes: Lionel Messi, zurdo por naturaleza, juega volcado a la derecha en el Barcelona, lo mismo Arjen Robben en el Bayer Münich. Aunque no siempre sean así, rápidamente se me ocurre el de Robinho en el Milán, Neymar en Santos, Di María en el Reald Madrid, entre otros. He aquí ejemplos de jugadores avocados a tareas ofensivas, en posiciones afines. Pero cabe destacar que no es exclusivo en delanteros. Esto se manifiesta tanto con laterales, mediocampistas externos o carrileros (como prefieran denominarlos) y extremos. Estas posiciones varían según el esquema que elija el entrenador.
Si bien esto ocurre en todas las ligas del mundo, los casos referidos  demuestran que los mejores equipos, con sus respectivas figuras lo efectúan y da resultado.
El cuestionamiento hace alusión a si esta modalidad es resultante en Liverpool. El partido pasado (vs West Brom) fue lo último que me impulsó a desarrollar este planteo ya que, si bien viene siendo una costumbre desde hace un tiempo en el club y es algo que sucede actualmente en el fútbol del mundo, en el caso del Liverpool reincidió inclusive con la llegada del nuevo entrenador.
El primer caso y de mayor gravedad, según considera quién les escribe, es el de Glen Johnson, lateral derecho por naturaleza. Cuando su andarivel es el izquierdo (con Daglish varias veces y Rodgers el último partido mencionado), da la sensación de que esas escapadas al ataque son forzadas, no dispone de la soltura, ni la velocidad característica y, menos aún, le es posible llegar hasta el fondo para enviar al centro o, por qué no, internarse en el área como nos suele tener acostumbrados. Hay una pérdida de sorpresa y se desperdicia un hombre que puede significar una buena herramienta de ataque.
Dado que el Liverpool en estas últimas temporadas acostumbró a jugar con mediocampistas centrales, recaemos directamente en los extremos o segundos delanteros. Craig Bellamy, quién abandonó el club esta temporada, segundo delantero o extremo, diestro por naturaleza, jugaba volcado a la franja izquierda. Con el galés es difícil hacer un análisis preciso, ya que no era un habitual titular, sumado a que, a veces, él tenía la facultad de poder terminar la jugada tratándose de delantero, a diferencia de Johnson y Downing (otro de los afectados).
Con el ex-Aston Villa, ocurre algo similar al igual que con el defensor. Al ser un mediocampista por afuera o extremo, y su pierna fuerte sea la zurda, no pudo exprimir su juego por el costado contrario. En velocidad o cambios de ritmo siempre debe aplicar el freno para acomodarse a su pierna hábil. Queda la sensación de un jugador incompetente para atacar, ya sea para adentrarse en el área por el medio, para romper defensas mediante asistencias o la media distancia, o para llegar hasta el fondo y lanzar centros.
Respecto a Johnson (jugó de lateral izquierdo en lugar de José Enrique) y Downing (acompañó a Suárez y Borini por el costado derecho),  a la vista hay jugadas que evidencian lo descripto. Dentro de las poquísimas aproximaciones que tuvo el Liverpool por las bandas, hubo un centro por cada uno arrojados a las nubes. Entonces: ¿tiene sentido tenerlos así?
En consecuencia, en Liverpool parecería o produce un efecto adverso: el jugador se desnaturaliza, queda eximido de exhibir todo su potencial, carece de esencia y trascendencia.
Reitero, en los primeros ejemplos citados: Messi, Robben, Robinho,etc., la modalidad rinde sus frutos, son cracks que rinden como tales.
 En los Reds, con algunos jugadores hay tendencia de hacer lo mismo (Borini también podría ser contemplado como ejemplo), lo hacía Daglish y ahora al parecer Rodgers también...
Mientras, por lo menos quién abordó este punto de vista, queda la expectativa de que, como ocurre con otros jugadores en otros equipos, en Anfield pueda ser redituable también.

sábado, 18 de agosto de 2012

Un debut impensado y para el olvido

                                          Fuente: www.liverpoolfc.tv



En el comienzo de la Premier League y debut del nuevo tecnico Brendan Rodgers a nivel local, el Liverpool cayó derrotado por 3 a 0 ante el West Brom como visitante. Fue expulsado Agger y Reina salvó lo que pudo haber sido una goleada.
A pesar de haber empezado con el pie derecho en sus dos primeros partidos oficiales, ambas victorias 1 a 0 y 3 a 0 frente al FC Gomel en los playoffs de la Europa League, el reemplazante de Dalglish tuvo un flojo e indeseado estreno.
Dos de los tres refuerzos que llegaron fueron parte de la alineación titular que formó así: Reina; Kelly, Skrtel, Agger, Jhonson; Lucas Leiva, Gerrard, Allen; Downing, Suárez y Borini. Durante los primeros 45' el encuentro fue parejo, sin actuaciones destacables por parte de los dos equipos, pero fue el local el que encontró la ventaja, tras un soberbio remate de media distancia, luego de un córner en favor. Lo peor iba a llegar después...
Al poco tiempo de iniciada la segunda mitad, Agger vio la tarjeta roja luego de empujar a un rival que se iba cara a cara con Reina. El mismo "Pepe" lo detuvo y dejaría al Liverpool con vida, pero solo por unos instantes. Skrtel fue anticipado en su área y derribó a Long, quien había sido víctima también del primera penal y  esta vez el West no perdonó. Desventajado en el resultado y en condiciones númericas, sin oposición alguna, a trece minutos del final recibió el tercero.
 Si bien los locales no fueron una topadora, los rojos pagaron caro sus desatenciones en el fondo, ya que en el primer gol nadie del equipo cubría receptores fuera del área cuando se ejecutó el córner, mientras que en el primer penal la defensa quedó muy mal parada, a diferencia del segundo que derivó de un error en la salida desde el fondo.
En la parte ofensiva, se notó un intento de plasmar la idea del técnico de lograr un ataque vertical y con velocidad, pero se le hizo cuesta arriba durante casi todo el partido. Ni Downing, ni Suárez, ni Borini fueron capaces de encontrarse y realizar un ataque asociado.
Tan solo fue el comienzo y como sí era de esperar, el entrenador tendrá mucho por trabajar. Lo llamativo fue que en este primer partido, salvo los dos refuerzos, jugaron la mayoría de los titulares habituales en la era Dalglish.