jueves, 3 de noviembre de 2011

¿Hacía dónde va?


A poco de cerrarse la primera mitad de temporada, la situación del Liverpool es ambigua. Sin disputar torneos internacionales, hizo aguas para llegar a la cima en el Torneo. Previo al triunfo como visitante ante el Norwich por 2 a 0, cosechó dos empates paradójicos.
   Frente al Manchester United, el partido más deseoso de ganar, por rivalidad, y más difícil, fue 1 a 1 con sabor a derrota. El conjunto de Dalglish fue superior durante todo el encuentro, pero a pocos minutos del final, el último campeón encontró un punto.
   El fútbol da revancha, dice el dicho y el Liverpool tenía la posibilidad. Otra vez en casa, en frente el Norwich. A priori un encuentro accesible para llevarse los tres puntos. Mismo resultado, pero lejos de ser el Liverpool arrollador que puso contra las cuerdas al Manchester. Poca certeza en ataque, falta de ideas y sin garantías en el fondo. Otro tren que dejaba pasar.
   La Premier League es una liga extensa, la cual requiere una constante regularidad, tanto en sus comienzo, desarrollo y epílogo.  Diez puntos lo separan del Manchester City, cómodo líder. A esta altura no es determinante, pero si se prolongase esta ventaja en el transcurso de la liga, si lo será.
Todavía hay un largo camino por recorrer, pero la sensación es que los Reds todavía no encuentran la regularidad precisa para transitarlo.
   Mientras tanto, con un equipo rotativo, avanza en la Curling Cup, donde lo aguarda el Chelsea en cuartos de final. Allí ganó todo partido que disputó. De hecho, en la última ronda, la víctima fue el Stoke City como visitante, rival que lo derrotó por primera vez en el torneo, justamente como local.
   Esta serie de sucesiones, denotan la falta de equilibrio. Liverpool aún no ha logrado aferrarse a algo y hacerse fuerte con eso. La Curling Cup podría serlo, para ello habrá que ver qué pasa con el Chelsea, su primera prueba de fuego.
  En tanto que en la Liga, tiene la mismísima posibilidad de volver al triunfo de local, donde los puntos desperdiciados duelen más. El turno lo tiene al Swansea City.  Todavía hay margen, para asentarse y aceitarse, para cuando sea el turno del Chelsea y del Manchester City, sus otros dos próximos rivales, ambos por la liga.